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SOMBRAS DEL PASADO - Cap1

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leyva1130's avatar
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NOTAS PARA SEGUIR LA LECTURA:

Los “:::::::::::::::::::” son saltos en el tiempo, equivalentes a unas horas, días o semanas… también son saltos de escenario.

Los pensamientos de los personajes irán entre comillas, de la siguiente manera: – “pensamiento” –

Los recuerdos de frases irán en mayúsculas y en cursivas, de ser posible centrado el texto: “SIGUE DERECHO AL PALACIO… NO TE DETENGAS POR NADA…”

Los Flashback irán con sus respectivas leyendas y en negritas, para distinguirse del resto del texto.

Se hace alusión a la película “Los secretos de los maestros”, dónde se habla del pasado de los Maestros Rino, Buey y Cocodrilo XD, tomando como base la historia que se cuenta en ella y no en la biografía inicial que dio DreamWorks.

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SOMBRAS DEL PASADO… LUZ DEL FUTURO
CAPITULO 1.- PAZ INTERIOR

Los meses habían transcurrido desde la derrota de Lord Shen…

Los habitantes que habían vivido de primera mano los estragos de las acciones del pavorreal monarca, mostraban mayor ánimo en sus actividades, la economía de la ciudad principal y de las aldeas aledañas se había vuelto a reactivar, regresando los productos de metal a la ciudad…

La sensación de paz podía volverse a percibir en cada rincón, mientras la guardia real se encargaba de reducir los pocos lobos que se habían quedado atrás, siendo encerrados en la prisión de Chorh-Gom y juzgados por sus crímenes en contra de toda China.

El comercio había aumentado, ante el anuncio de paz que se había realizado, retornando los habitantes que habían huido y logrado salir de la ciudad, antes de que Lord Shen tomara el poder y control de la ciudad, reuniéndose nuevamente las familias, creándose un aire festivo durante los meses posteriores.

De ese modo, la ciudad de Gongmen recuperaba parte de su cotidianidad lentamente, olvidándose un poco de las secuelas provocadas por el intento de conquista del Pavo Real, contándose de individuo a individuo la grandiosa leyenda del Panda que había derrotado al terrible enemigo, que hasta antes de esa noche en el puerto, habían considerado imparable.

Los edificios y puentes habían sido reconstruidos, tratando de rememorar la belleza que habían tenido antes de su caída, facilitando los trabajos que realizaban los pobladores para devolverle su belleza a la ciudad. Sin embargo, la reconstrucción del Palacio iba siendo realizada de forma lenta, al tratar de regresarle esa magnificencia de siglos que tenía.

Independiente del festejo de la Ciudad de Gongmen y sus alrededores, el maestro Buey y Cocodrilo, mantenían el duelo por la pérdida de su maestro, su compañero de entrenamientos, de peleas, de leyendas… erigiéndose un pequeño monumento justo en el punto dónde pereció el maestro Rino, en el patio del palacio, junto a su martillo, en honor a sus servicios prestados y a la leyenda que fue y siempre sería hasta el final de los días.

Ambos maestros, continuaban la guardia y protección del Palacio de los pavorreales y de la ciudad de Gongmen, al jurar que resguardarían el lugar de cualquier peligro que se presentase a futuro, en tanto la vieja adivina no indicara la llegada de un nuevo heredero al trono, tal y como había señalado hace unas décadas atrás, antes del retorno de Lord Shen.

Después de todo, tanto la ciudad estaba segura como toda China, gracias a que el guerrero Dragón demostraba una vez más su valía y su poder, remarcando la buena decisión del Maestro Oogway al elegir al habilidoso panda como protector de toda China, y las excelentes enseñanzas del Maestro Shifu, tutor señalado por el universo para entrenar y enseñar al Guerrero de Guerreros…

El maestro Buey se mantenía en las escalinatas del palacio de la ciudad, observando aquellas puertas por las que había entrado Lord Shen meses atrás, eliminando con su poderosa arma a su maestro y compañero, tirando a la basura toda la sabiduría y entrenamientos del maestro Rino, dejándoles ver la fragilidad que tenían como seres vivientes en ese mundo.

Eso eran simplemente, un ser vivo más, que podía morir de un momento a otro, sin importar todo el entrenamiento que tuvieran, ni las fuerzas que demostraran, ni los conocimientos que obtuvieran con tantos estudios y experiencias.

Nada de eso importaba al momento de la muerte.

Eso les había dejado perfectamente claro, entre Shen y Rino…

– Tu exceso de confianza te empujo a ese destino – murmuró el maestro Buey, cerrando los ojos, mientras una suave briza pasaba a su alrededor como si el propio maestro del Kung fu le respondiera desde el más allá…

Su corazón continuaba acongojándose, al saberse especialista en encontrar de forma rápida y con un solo vistazo la debilidad de sus contrincantes, antes y durante la pelea, algo que le había salvado en muchas ocasiones la vida y les había traído la victoria en incontables batallas… y a pesar de tener tan valiosa habilidad, no había podido encontrar ninguna debilidad en aquella poderosa arma, que le había arrancado la vida (y algunas partes de su cuerpo) a su amigo…

Ni siquiera la impenetrable piel del maestro cocodrilo hubiera servido para detener aquellas bolas de fuego, que se clavaban en los objetos más duros, destruyéndolos y convirtiéndolos en pedazos.

La fuerza de Rino no había sido suficiente…

La piel impenetrable de cocodrilo no podía contra esa arma…

Su habilidad en tácticas y puntos, era inservible ante lo desconocido y lo nuevo…

Esas razones, habían sido más que suficientes para rendirse y entregarse, mostrando su respeto a Lord Shen, condicionando su acción a que hiciera lo que deseara con ellos, siempre y cuando no les causara daño a los habitantes de la ciudad, de forma que se construyera una extraña apariencia de paz y tranquilidad que, al final de cuentas, no había resultado tan bien con la llegada del panda.

Los ciudadanos fingían estar en paz realizando sus actividades cotidianas, los lobos se mantenían al margen de las actividades normales de los ciudadanos y no causaban mayores destrozos de los permitidos en sus fechorías, como los robos ocasionales que realizaban y sus abusos menores, en tanto lograban conseguir el objetivo de su señor.

Dicha decisión tomada, había resultado en una terrible acción y un terrible error de su parte…

No sólo habían mostrado sumisión y resignación, sino también temor a un enemigo que de haberse unido todos, hubieran logrado expulsar… pero no, optaron tomar un camino fácil, permitiéndole al pavorreal un camino abierto a sus planes de conquista, a pesar del peligro que significaba.

“EL KUNG FU ESTA MUERTO, PANDA”


Esas habían sido sus palabras desde aquella celda, mientras aquel joven guerrero parecía sumergirse en la sorpresa y decepción… y el único, que había tenido mayores agallas para enfrentarse contra aquella criatura y su creador que todo ellos, al grado de perder la vida ante aquella monstruosa arma que parecía ser imparable.

No había salvación para nadie, Lord Shen lograría su cometido y sumiría a toda China en la total miseria… los días de prosperidad y felicidad habían acabado para todos…

Y aun cuando todas las predicciones iban en su contra, ese grupo de guerreros continuaban luchando, aun cuando su amigo el panda había muerto y ellos habían sido torturados, hasta mostrar sumisión a Lord Shen… sin que el enemigo, lograra apagar esa chispa de esperanza, que tanto como el maestro cocodrilo como él, habían perdido… hasta que llego él, a abrirles los ojos…

*FLASHBACK*

– ENTIÉNDALO!!!! EL KUNG FU ESTA MUERTO!!!

Exclamó el Maestro Buey, golpeando la reja que le impedía salir de su prisión, mientras el maestro cocodrilo bajaba la mirada.

– Se lo dije a ese panda y te lo repito a ti, NO HAY ESPERANZAS, no hay nada que podamos hacer contra esa arma, lo mejor, es permitirle avanzar y hacer lo que él pide… así, inocentes no tendrán que morir.

El panda rojo, que había llegado a aquella prisión, se mantuvo inmóvil, observándoles fijamente… aquel, no podía ser el destino que tenían todos ellos, por algo, Oogway había nombrado antes de partir al Guerrero Dragón, para proteger toda China, aunque ahora, tal vez se encontraba muerto.

– Sí esa es su decisión, son libres de quedarse en este lugar – respondió finalmente Shifu, dándose media vuelta con las manos en la espalda – estoy seguro que encontraran un mayor honor, quedándose en este frio y sombrío lugar, mientras afuera, se encuentran mis alumnos dando su vida por defender las de los ciudadanos… eso, es algo que sin duda, el Maestro Trueno Rino hubiera deseado, al ver que efectivamente, el kung fu ha muerto dentro de ustedes.

Y sin más, Shifu salió de la prisión, dejando atrás a los dos guerreros que le veían con expresión confusa y sorprendida, como si trataran de entender el significado de las palabras dichas.

– Muerto… para nosotros – murmuró el maestro Cocodrilo, girando su rostro en dirección del maestro Buey, encontrándose con su mirada, antes de que la puerta de la celda saliera despedida y ellos salieran.

El maestro Shifu tenía razón, el Kung fu sólo estaría muerto, si ellos así lo creían y lo permitían…

*FIN FLASH BACK*

Suspiró profundamente, abriendo nuevamente sus ojos al rememorar la batalla en la que se vieron envueltos y dónde casi fallaban con su juramento de protegerla de cualquier peligro, exponiéndola a un peligro mayor con esa mala decisión tomado por ellos.

Tal vez, si Rino hubiera estado a su lado y no hubiera luchado solo contra Shen… las cosas hubieran sido muy diferentes a como fueron…

– No… eso no es verdad, ninguno de los tres hubiéramos podido contra esa cosa – se respondió a sí mismo, negando con la cabeza y cerrando los ojos, dándose media vuelta para entrar al palacio, donde seguramente se encontraría su amigo descansando de los entrenamientos que habían realizado horas atrás, aun cuando no terminaban de sanar todas sus heridas.

Como fuera, aun dentro de su corazón no consideraba que los tres hubieran sido lo suficientemente fuertes para hacer frente a aquella arma, sin ayuda de los alumnos de Shifu y del propio maestro, por lo que debían continuar preparándose en caso de que algo peor se presentara en la ciudad de Gongmen.

– Tu padre debe estar muy orgulloso de ti, amigo mío.

Dijo al maestro Rino, con una media sonrisa, avanzando por el pasillo a paso lento y cansado, percibiendo el propio desgaste que había tenido en todos esos años y esperando que pronto llegara el verdadero heredero del trono, para anunciar su retiro y descanso.

Bien había hecho Oogway al entregarse finalmente a la muerte, luego de tantos años de servir al pueblo y al Kung Fu… aunque, no negaba que había dejado un muy buen heredero de sus enseñanzas, por lo que China continuaría protegida y segura; y no lo decía por el maestro Shifu, que era un gran y habilidoso guerrero del Kung fu, sino del Guerrero Dragón en sí, que sin ese corazón puro y valeroso, no hubiesen derrotado a Lord Shen…

Además, todavía les quedaba una misión más, esperar al heredero del trono de Gongmen, que debería aparecer en un momento a otro, de acuerdo a la profecía de la vieja adivina…

– CUANDO LORD SHEN REGRESE, UN GUERRERO NACERÁ, CON EL CORAZÓN PURO Y LA FUERZA DE MIL HOMBRES… CON LA REPRESENTACIÓN DE LO BUENO Y LO MALO… MARCADO POR EL PROPIO DESTINO TANTO EN SU PASADO, COMO EN SU FÍSICO Y EN SU FUTURO… QUE SERÁ DIGNO DE OCUPAR EL TRONO –

Esas habían sido las palabras dichas por los viejos pavos reales antes de morir, como parte de la antigua predicción que había realizado la vieja adivina que muchas veces les acompaño a vigilar el palacio y mantenerlo aún con vida.

Todavía antes de partir en dirección desconocida, la vieja cabra les había dicho que la llegada de aquel guerrero digno del trono no tardaría en cumplirse, que debían ser pacientes a su nacimiento y desarrollo, puesto que a través de esas puertas entraría, igual que lo hizo Lord Shen meses atrás.

Fuerte, decidido… con el aire y porte de monarca, que en su sangre llevaría.

Y que en su mirada, descubrirían la verdad del pasado, la premonición del futuro… y el verdadero destino que tendrían todos.

Como fuera, mientras llegara dicho chico, ellos deberían cuidar y proteger lo que ahora era el palacio en reconstrucción, recuperando cada parte de la gloría de esta a través de sus memorias.

Después de todo la paz y tranquilidad existían tanto en la ciudad como en China… Por lo que su corazón podía tener la paz interior que necesitaba, para aguantar un par de décadas más.

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A muchos kilómetros de ese lugar…

En el tranquilo Valle de la Paz, lugar donde se vio nacer al Guerrero Dragón como tal y los grandes guerreros protectores llamados “Los cinco furiosos”, se percibía un ambiente festivo de parte de los habitantes, que hasta le fecha celebraban la victoria de todos ellos, en esa cruenta batalla que había tomado la vida de uno de los grandes Maestros del Kung Fu.

Los guerreros simplemente habían contado lo que el maestro Shifu les había indicado, por mucho que uno de ellos llegaran a desear alardear sobre la gran batalla que enfrente… y en ese aspecto, la advertencia había sido para el guerrero de blanco y negro, que solía presumir de sus propias victorias y alardear de sus habilidades.

Advertencia, que parecía haber estado de más, puesto que de alguna extraña forma, el panda mostraba diversas secuelas propias de la batalla que había vivido semanas atrás… secuelas que continuarían presentes en los meses posteriores, al limitarse a hablar lo estrictamente necesario, sin profundizar en nada más que no le preguntaran al joven panda.

Tal vez se debía, porque Po había alcanzado la paz interior que tanto necesitaba dentro de su corazón, demostrando que a pesar de la apariencia despreocupada diaria, siempre había existido un “algo” que le perturbaba y no le dejaba vivir en paz, que le lastimaba día a día silenciosamente, sin que nadie se diera cuenta de su sufrimientos… quién pensaría que al descubrir sus verdaderos orígenes, y que en efecto había sido amado por su verdadera familia (al grado de sacrificar sus vidas con tal de verle continuar con su camino), había llegado a valorar a quien había sido su padre adoptivo y único padre, sin importar nada más.

Había causado cierta gracia a Shifu, cuando Tigresa le conto los detalles de su viaje a las tierras de Gnogmen, cuando Po se había mostrado afectado y sorprendido de que su padre, no hubiese sido su verdadero padre, demostrando con ello la inocencia y la pureza de su propio corazón…

¿Importaba que su padre fuera un ganso, cuando le había prodigado todo el amor que había necesitado, hasta de sobra? No, la verdad no importaba… Y Po lo había demostrado con sus acciones…

Un techo, comida y mucho amor… Esa había sido la formula necesaria para convertirse en quién era, para impulsarlo a llegar a su destino como Guerrero Dragón.

Inclusive, al final de todo, Po había dejado ver que ese sufrimiento derivaba de una mera curiosidad, que tenía todo niño que había sido dado en adopción… incluso, Shifu estaba seguro que la misma Tigresa había estado tentada en buscar sus orígenes, deteniéndose tal vez por el propio temor de encontrarse con algo desagradable de su pasado y por la propia responsabilidad que tenía como miembro de los Cinco Furiosos.

Finalmente, Shifu se había animado a charla con un muy silencioso Po, que mostraba una mayor dedicación a las meditaciones, por mucho que se durmiera a la mitad de estas.

No se había dado el momento del dialogo… al menos, no uno correcto dónde el panda no emprendiera la huida, alegando tener entrenamientos o algo que cocinar, o en un caso muy extremo alegaba que su padre le llamaba desde la lejanía para que le ayudase con algo, mudándose inclusive durante un tiempo al lugar donde era su verdadero hogar, alejándose tanto de Shifu como de sus compañeros guerreros.

Como fuera, las palabras que debía decirle fueron emitidas en aquella tarde lluviosa, en el salón de meditación, en aquel salón donde descansaba la pequeña lagunilla que reflejó por tantos años el rollo del Dragón.

“No hay casualidades en este mundo”

Le había dicho el Maestro Shifu, con voz tranquila, bajo el reflejo de las velas que les iluminaba, en el instante en que lo atacara de preguntas una y otra vez, sobre lo ocurrido y porqué había sido el único sobreviviente de toda una aldea, dejando ver la razón que le molestaba constantemente desde su llegada al Valle de la Paz.

*FLASHBACK*

– Pero… porqué yo, maestro Shifu?! Por qué no otro panda u otro guerrero?

La pregunta había llegado de la nada, luego de un tiempo considerable de silencio de parte del panda, que parecía haberse entregado un poco más de la meditación, luego de regresar de su viaje a la ciudad de Gongmen.

De hecho, había pasado varios días en silencio, luego del ultimo interrogatorio que había tratado de realizar Shifu, consiguiendo sólo que el panda se cerrar por completo y comenzara a evadirlo como si de un ente peligroso se tratara.

Ante la posibilidad de la vanidad y arrogancia que llegaba a mostrar Po, ante tantas atenciones que le mostraban los demás habitantes del Valle de la Paz en el pasado, Shifu había decidido retirarlo de la ajetreada vida social, encerrándole de forma delicada y bajo engaños piadosos, de forma que el ego del joven guerrero no llegara a nublar su vista y se perdiera del buen sendero que iba tomando con tanto trabajo y dedicación.

Detalle que había estado de más y había resultado inservible, ahora que el Guerrero Dragón se mostraba retraído, incluso asustado a todo lo que le rodeaba, haciendo suponer a su maestro que seguramente se sentía fuera de lugar, por lo que sólo había preocupado mucho más al pequeño mamífero que solo podía esperar a que Po buscara su ayuda en el momento indicado.

Y ese momento, había llegado…

El panda rojo suspiró profundamente, desde lo más hondo de su pecho, dejando salir todo el aire de sus pulmones, antes de abrir los ojos y ver al dudoso guerrero que había roto su concentración y le veía con una expresión asustada, buscando una respuesta.

Error… Po nunca estuvo concentrado en todo ese tiempo.

Simplemente fingía una tranquilidad para maquillar las dudas que iban naciendo día a día, sobre su pasado, su futuro y su destino, sin que ninguno de ellos lo notase… aunque, el cambio de comportamiento había sido demasiado evidente, como para ignorarlo.

El pasado del panda había sido develado, mostrándose uno triste y terrible, que al no verse detenido el camino, continuó tornándose en una vida feliz y tranquila, llena de sueños y deseos puros y sinceros, de parte de un pequeño panda que parecía haber olvidado los días en que estuvo con sus padres, como una forma de protegerse a sí mismo, y permitirse ser feliz, claro, si se veía desde un buen punto de vista…

Y esa era forma, en que Po demostraba que había alcanzado sus sueños, algo muy diferente a lo que había ocurrido con Lord Shen, que con cada día se acentuaba su frustración, encaminándolo a un precipicio donde caería sin poder evitarlo.

– Maestro…

El aludido, levantó una mano para silenciar al panda, cuyos ojos temblaron ante la negativa de respuesta, bajando la vista para luego cerrar los ojos y continuar con su meditación, convenciéndose que no alcanzaría una respuesta tan pronto como había pensado y que había sido un error tratar de hablar con Shifu en esos momentos.

Pero…

No había encontrado mejor momento… o más bien, no había podido reservarse más tiempo.

Necesitaba una respuesta y ya!!!! Su corazón dolía con cada día que guardaba silencio y su cabeza se sentía estallar cada vez que trataba de pensar en lo ocurrido y lo descubierto.

Inclusive las continuas pesadillas con imágenes del pasado con su familia y de la batalla con Lord Shen continuaban golpeándole noche tras noche, como si algo trataran de indicarle algo, sin poder descubrir qué era.

Y pensar que la pesadilla del rábano y el kung fu había sido frustrante…

– Po – había llamado el maestro de las orejas grandes, mientras su alumno dirigía nuevamente su vista a él y le veía con esos ojos llenos de dudas – todos tenemos un destino, un camino que recorrer… nada en este mundo, es una casualidad, sólo podemos hablar de un destino que se crea con nuestras decisiones y las del resto.

Explicó con paciencia, mientras Po se giraba para verle mejor.

– Todos tiene un motivo, una razón de ser en este mundo, hasta el más pequeño insecto y la más insignificante planta, todos, tienen una función que influye en la vida de los demás, ayudándoles o perjudicándoles en su camino… – explicó el panda rojo, mientras continuaba observando el agua.

Sin decir nada más al panda, antes de estirar su bastón y golpear tres veces la superficie del agua, en diferentes puntos, creando ondas en el agua que comenzaron a propagarse en la superficie, hasta que finalmente se encontraron, rechazándose y creando unas pequeñas olas curiosas.

– Shifu… – llamó el panda al ver aquel efecto que no lograba entender del todo.

– Po… cada una de nuestras acciones, influyen en las acciones de los demás – explicó Shifu, mientras el agua se calmaba – Lord Shen, al tomar esas acciones, empujó a que tu destino se cumpliera, aun cuando él buscaba un resultado diferente..

Suspiró suavemente, cerrando unos segundos sus ojos.

– Tu destino, era convertirte en el guerrero dragón y por eso mismo, el propio universo te empujo a llegar, desde que eras un pequeño bebe, al Valle de la Paz, para presentarte ante el maestro Oogway y fueses nombrado como tal, así como entrenado… tal vez no fue el mejor camino ni el más fácil… pero no siempre es fácil – dijo doblando un poco sus orejas.

– No todos los caminos son iguales… mi camino fue doloroso y tuve que transitar por mucho, para llegar a ser el maestro que soy, pagando por mis errores y por mis aciertos.

Asintió una vez con la cabeza, estirando una mano para tomar la de Po, sonriendo por la docilidad que mostraba su alumno ante sus enseñanzas.

– No fue fácil mi niñez, ni mi juventud… mucho menos cuando me convertí en maestro del Palacio de Jade… y mis momentos más dolorosos fueron cuando Tai Lung se rebeló y atacó al Valle de la Paz y cuando Oogway te nombró como el Guerrero Dragón, teniendo la obligación de entrenarte… esas noches sin dormir, ese terror que sentí de pensar en el horrible…

– Maestro…

– … destino que tenía ante mi…

– Maestro…

– … al tener que cumplir mi destino como maestro, ante un inepto como tú!!!

– Shifu!!! – chilló el panda, soltándose del agarre de su maestro, componiendo una mueca de frustración por las palabras del panda rojo.

No era un secreto entre ellos lo mucho que le había desagradado su presencia al maestro Shifu en el inicio de sus entrenamientos, pero por esa misma sinceridad, se habían ganado la confianza entre uno con el otro, llegando a cimentar una relación armoniosa y agradable que duraba hasta ahora y continuaría existiendo hasta el final de sus días, seguramente.

Po se había convertido en un vivo ejemplo de los ideales de Oogway… en el mejor alumno de Shifu, demostrando que el maestro Shifu era lo mejor maestro del Kung Fu sobre el resto de maestro… y a su vez, que el panda era el guerrero más poderoso, a pesar de todos los defectos que cargaba encima.

Shifu rió suavemente, entendiendo lo que necesitaba el joven panda, que cada día se mostraba más digno de ser el Guerrero Dragón.

– Y es por eso mismo, mi joven alumno… te digo con confianza y seguridad, que a pesar de haber logrado la paz interior, necesitas aprender algo mucho más importante y, sobre todo, conseguir esa paz que tu cuerpo y mente necesitan, para completar tu entrenamiento – dijo el maestro, levantándose del suelo – dentro de una semana, saldrás en un viaje revelador, la naturaleza te guiara a tu destino y te enseñara lo que necesitas saber… llega un momento en la vida de todo guerrero que necesita encontrarse a sí mismo, y ese momento, te ha llegado.

Aseguró, realizando una suave reverencia, en tanto el panda se apresuraba a levantarse e imitaba el movimiento de su maestro.

– Entonces, los chicos y yo iremos de viaje, y lucharemos contra bandidos y otros guerreros?!!!

– No, Po… es un viaje que harás tú solo…

– Qué?!! Pero Shifu!!!! Viajar solito es muy aburrido!!! – se quejó el panda, realizando una pequeña rabieta, mientras el panda rojo negaba con la cabeza e iniciaba su camino fuera del salón, siendo seguido por el joven guerrero.

– Que iras sólo… y he dicho panda… – Sentenció Shifu, entre lo divertido que se tornaban las quejas del panda que no deseaba partir solo y la emoción de ver crecer a su alumno…

Lo mejor sería preparar todo para el viaje…

*FIN FLASH BACK*

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::: CONTINUARA :::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

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NOTAS PARA SEGUIR LA LECTURA:
Los “:::::::::::::::::::” son saltos en el tiempo, equivalentes a unas horas, días o semanas… también son saltos de escenario.
Los pensamientos de los personajes irán entre comillas, de la siguiente manera: – “pensamiento” –
Los recuerdos de frases irán en mayúsculas y en cursivas, de ser posible centrado el texto: “SIGUE DERECHO AL PALACIO… NO TE DETENGAS POR NADA…”
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ARCO 1
SOMBRAS DEL PASADO… LUZ DEL FUTURO
PROLOGO.- EL GUERRERO PLATEADO

El sonido de pisadas se escuchaban en el andar de un joven guerrero, cuya capa ondeaba con el viento, mientras el silencio le rodeaba como si no quisiera el universo interrumpir con sus cavilaciones, con sus pensamientos y el destino que debía de tomar y le esperaba al final de su trayecto, quisiera o no tomarlo y
 
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NOTAS PARA SEGUIR LA LECTURA:
Los “:::::::::::::::::::” son saltos en el tiempo, equivalentes a unas horas, días o semanas… también son saltos de escenario.
Los pensamientos de los personajes irán entre comillas, de la siguiente manera: – “pensamiento” –
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SOMBRAS DEL PASADO… LUZ DEL FUTURO
CAPITULO 2.- DECISIONES

El silencio continuaba en el recinto de los maestros del Kung Fu, escuchándose únicamente la voz del panda rojo.
– Y por esos motivos, decidí que el Guerrero Dragón realizara un viaje de conocimientos y encuentro espiritual – terminó Shifu de explicar a su grupo de estudiantes lo
 fav.me/d973xtp

Hola a todos!!! Les dejo el segundo capítulo de este fic, que también podrán encontrar en mi pagina de Fanfiction: SOMBRAS DEL PASADO

Espero que sea de su agrado y no olviden dejar comentarios, eso me ayuda mucho a continuar XD.

Saludos y muchas gracias por sus comentarios y favoritos.

Summary: Luego de la batalla en la Ciudad de Gongmen, el guerrero dragon se dispone a realizar un viaje por toda China, sin saber que su enemigo Lord Shen, ha sobrevivido a la batalla y prepara su venganza. Creando un destino que los unirá a ambos... Relacionado con Legends of Awesomeness y las películas de los maestros... YAOI, RAPE y Mpreg. Están advertidos. Lord Shen/Po

Kung Fu panda © Dreamworks
Historia © :iconleyva1130::iconpretor30:

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Comments9
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Pixie-van-Winkle's avatar
Me gustó mucho, buen comienzo X3. No me extraña que el pobre de Po se sienta tan confundido ante tantas revelaciones x_x, nya pobrecito ;.;. Aunque sin duda tengo que ver de nuevo esa película para acordarme de detalles =w=

Me gusta mucho cómo conservas el carácter de los personajes al plasmarlos en tus fics, gran trabajo Leyva-chan :la: